La Tesorería Municipal presentó éste lunes 13 de marzo, su informe de gestión vigencia 2016 ante el honorable Concejo de Bucaramanga, dejando muchos vacíos e incongruencias en el mismo, lo cual no define realmente qué sucede con la situación financiera de la capital santandereana.
Concejales como Pedro Nilson Amaya y Dionicio Carrero, manifestaron la pobreza en el informe presentado por la Tesorera Municipal Jakeline Martínez Rodríguez: “No veo coherencia en el informe, no hay planificación en el presupuesto del municipio”, dijo el concejal del Partido Opción Ciudadana.
Por su parte, Uriel Ortíz y Wilson Mora cuestionaron la manera cómo la administración ha venido manejando los temas financieros de la ciudad. Ortíz Ruíz denunció cómo desde la alcaldía se imponen ‘donaciones’ a los contratistas para que les pague las cuentas pendientes. “Pareciera como si existieran tres tesorerías; la que me maneja el Alcalde, la Secretaría de Hacienda y la de la Tesorera”, manifestó el concejal liberal Mora.
El cabildante Henry Gamboa Meza fue más allá y recalcó a la tesorera municipal, que todas estas irregularidades y vacíos en las finanzas de Bucaramanga podrían acarrearle problemas por mala conducta fiscal. “Necesitamos un balance real, tenemos que saber realmente qué es lo que tiene el municipio” dijo el concejal Gamboa.
Finalmente el cabildo cuestionó que el municipio le adeuda a institutos descentralizados pagos en contratistas de años 2015 y 2016 y no ha habido hasta el momento respuesta por parte de la alcaldía para saldar estos compromisos financieros.